Simplemente porque estamos conectados.

Estamos todos conectados, unidos por un hilo invisible, infinito en su potencial y frágil en su diseño. Pero al mismo tiempo que estamos conectados también somos simples individuos, naves vacías que pueden llenarse con infinitas posibilidades, una variedad de ideas y creencias, una colección dispersa de recuerdos y experiencias.

¿Yo puedo ser yo sin todo eso?, ¿tu puedes ser tú?. ¿Y si ese hilo invisible que nos mantiene unidos se cortase, desapareciera, qué pasaría?, ¿qué sería de esos millones de almas solitarias y desconectadas?.

Y ahí yace la gran misión en nuestra vida, buscar, conectar, unir. Ya que cuando nuestros corazones son puros y nuestros pensamientos están en sintonía, formamos un único ser, capaz de reparar nuestro frágil mundo, y crear un universo de infinitas posibilidades.

Comments