Pasa el tiempo y como si fuera un mandato trae con sigo todo lo que nos hace crecer, todo lo que de una manera especial se queda con nosotros hasta el fin de nuestros dias. Todas las experiencias son transitorias, la adolescencia no es una exepcion. Haber compartido con chicos todos estos anos es un regocijono, un regalo, una etapa de luz, de exploros, de aventuras, de momentos inolvidables. Mirar atras es volver a sentir la sonrisa, la algarabia, el gozo conjugado en una sola etapa, momentos que permaneceran tatuados en nuestras almas, esos dulces momentos que sabemos no volveran, pero que igual estaran siendo parte de nuestras vidas para siempre, actuando como una cajita de sorpresa que cuando la decidimos abrir se siente la fiesta de un tiempo que sabemos no volvera, pero que permanecera siendo parte de nosotros para el resto de nuestras vidas.
Todos hemos crecido, algunos son padres, otros ya hasta abuelos y fanstasticos esposos (as), otros ocupados con su carreras, y es que todo en lo absoluto se transforma, somos esclavos de crecer, envejecer y morir, pero esta estapa permanecera jovial eternamente en nosotros, nadie puede borrar que cada quien fue el companero de cada quien en la mejor etapa de nuestras vidas, nuestra adolescencia.
Los quiero mucho a todos mis companeros de clase ano 1987-1988/ Nuestra Senora del Sagrado Corazon de Jesus.... fue un inmenso placer verlos.
Juana Vasquez
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